
Dejando a un lado las comparaciones con otras cantautoras que han calentado sus confesiones en el brasero del jazz-folk-pop (Joni Mitchell, Rickie Lee Jones, Laura Nyro), Chan Marshall parece haber llegado a un estado de gracia y una depuración de su trabajo como compositora e intérprete que augura que ninguno de sus discos va a ser nunca menos que bueno. Como Bill Callahan (Smog) o Will Oldham (Palace, Bonnie 'Prince' Billy), irá siguiendo su propio camino y probando nuevas formas de contar sus historias, pero creciendo siempre como artista. En su versión 2006 convive su lado más desnudo e intimista ('hate') con otro más colorista y cálido (el tema 'the greatest'). Pero la voz es la misma, esa que cuando te pilla te atrapa.