¿Y se parece al disco de hace dos años, el LCD Soundsystem? Sí, el esqueleto básico es el mismo: un ritmo intenso y repetitivo que se mezcla de forma orgánica con la voz carismática pero un tanto amateur ('auténtica', vamos) de Murphy y las guitarras y baterías salidas del rock.
Las principales variaciones en esta ocasión son un mayor predominio de la electrónica y el pop (menos guitarras y mas azúcar), llegando en ocasiones ('someone great') muy cerca de la cyberdelia o de las producciones de Andrew Weatherall para Primal Scream.
El resultado es un trabajo en el que desaparece el factor sorpresa pero más sólido y trabajado. Disfrutable de principio a fin (me sobra la baladita final, igual que con !!!) y que supone un triunfo del inteligente Murphy: un tipo tan culto como hábil.
Xx